Cuando pensamos en actividades multiaventura de montaña para viajes de fin de curso normalmente imaginamos actividades llenas de emoción y espectaculares. Como hemos visto, la escalada o los jardines de cuerdas, el rafting o el descenso de cañones son ejemplos de esto. Sin embargo, el entorno de montaña, por su propia naturaleza, muchas veces no necesita de actividades complejas o material específico. La prueba de ellos son actividades multiaventura como el senderismo. Esta actividad, conocida también en los últimos años como trekking, es la base del montañismo y el lugar desde el que nacen otras tantas actividades. Su principal filosofía reside en el disfrute de la naturaleza, el respeto y el cuidado de la misma. Divertirse a partir de ella es el principal objetivo del senderismo: obtener placer de descubrir nuevos entornos naturales y experimentar con ellos numerosas sensaciones.
El senderismo no deja de ser, así, un deporte. Uno que nos enseña a disfrutar de los espacios naturales que tenemos a nuestro alcance, y cómo poder disfrutar de los mismos y obtener diversión y beneficios para nuestra salud. El senderismo con grupos de escolares ha de estar siempre guiado por monitores profesionales, que conozcan la ruta a realizar y también todos los puntos de interés del entorno. De esta manera, en un viaje de fin de curso multiaventura, se pueden realizar distintas rutas. Estas tienen una importante carga tanto deportiva como cultural. Los alumnos pueden descubrir y aplicar la teoría que están dando en conocimiento del medio o biología al entorno que está conociendo en ese momento. El senderismo posibilita la realización de sendas ecológicas, en las que los participantes se asoman a los ecosistemas y descubren el funcionamiento de los mismos.
Actividades multiaventura de fin de curso: rutas a caballo
Aparte de senderismo, en la montaña es posible realizar otro tipo de rutas. Es el caso de las rutas hípicas. Por estas, entendemos toda actividad que consista en que los participantes realicen un recorrido montados a caballo. Las rutas a caballo son también una de las actividades multiaventura más populares y con mayor recorrido histórico. El caballo ha sido durante muchos años de la historia de la humanidad la principal forma de desplazamiento. Hoy en día, supone una forma inigualable de disfrutar de un entorno de montaña, desde una perspectiva única y poco habitual en el día a día de los participantes. Las rutas a caballo estrechan la relación de los más jóvenes con su entorno natural. Además, inculcan ciertos valores de cuidado y respeto por la naturaleza, tanto por el medio ambiente como por las especies que lo habitan.
Las rutas a caballo se realizan siempre con el apoyo de un instructor, que conoce a los animales y las prácticas adecuadas para que la actividad tenga éxito y se realice con total seguridad. Los recorridos de este tipo tienen además la ventaja de que permiten conocer el paisaje desde una perspectiva distinta. El participante se siente más integrado en la naturaleza y parte de un ecosistema que funciona de manera completamente distinta al urbano, al que normalmente está acostumbrado. Para muchos niños y niñas, montar a caballo es una experiencia única, sólo realizable en viajes de fin de curso multiaventura o excursiones similares. Siempre es una buena opción tener en cuenta esta actividad dentro del planing y ofrecerla como nueva forma de conocimiento del entorno y de interacción con el mismo.
Actividades multiaventura de fin de curso: tiro con arco
Es el momento de prestar atención a otra de las actividades multiaventura de los viajes de fin de curso más habituales: el tiro con arco. Esta actividad, que históricamente surge como una forma de supervivencia, es en la actualidad un deporte recreativo que entretiene y divierte a mayores y a pequeños. El tiro con arco es una de las actividades multiaventura tradicionales, que normalmente se encuentra en todo planing, tanto de viaje de fin de curso como de campamento o excursión. En el tiro con arco, se enseña a los participantes a practicar este deporte. Consiste en el lanzamiento de flechas mediante un arco, con el objetivo de acertar en una diana. La diana tiene distintos colores: cuanto más se acerque al centro la fecha, más puntos obtendrá el lanzador. Esto permite que la práctica de tiro con arco pueda tener la posibilidad de establecer una competición entre los participantes.
Sin embargo, una de las ventajas del tiro con arco es que es un deporte atractivo, divertido y muy adaptable. Como hemos visto, puede tener un espíritu de competición, pero también uno meramente recreativo. E incluso, si en el viaje de fin de curso se está realizando alguna actividad tematizada (medieval, pirata) puede incluirse dentro de la misma. Mediante el tiro con arco se favorece, además, la concentración y la atención de los participantes. También se les hace conscientes de la importancia de los protocolos de seguridad, para que en todo momento la manipulación de flechas se realice de forma segura y sin correr riesgo alguno. Este hecho hace que el tiro con arco sea una opción segura de diversión dentro de un planing de viaje de fin de curso multiaventura.
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