Anteriormente hemos hablado sobre la historia de los campamentos de verano en España, y como desde el siglo XIX se da iniciativa a lo que hoy ha ayudado a millones de personas a formarse, aprendiendo y divirtiéndose al mismo tiempo.
Continuando con este tema tan interesante, en esta segunda oportunidad hablaremos del origen de las colonias infantiles granadinas que por historia fueron la continuación de los campamentos llevados a cabo por la Institución de Libre Enseñanza.
El éxito que tuvieron los campamentos de verano, conocidos como colonias de verano en aquel entonces, fue lo que impulsó al Ministro de Fomento, a declararlos como iniciativa educativa de interés público para el año 1892. Este hecho tuvo una importante repercusión ya que impulsó a las asociaciones civiles y políticas de finales del siglo XIX, a implementar otras iniciativas similares.
Precisamente en la ciudad de Granada surgió una de las iniciativas más interesantes, cuando La Real Sociedad Económica de Amigos del País realizó un certamen con el objetivo de que los participantes realizarán un debate aportando ideas en relación a cómo se podrían plantear en Granada las colonias escolares. Este debate buscaba motivar esta iniciativa y generar nuevas ideas para implementar las colonias infantiles.
El certamen lo ganó Berta Wilhelmi que posteriormente dirigió el campamento de Granada. Este campamento, impulsó a otra iniciativa que consistía en implementar el primer campamento unisex de España. En aquel entonces todos los campamentos estaban separados por sexos, pero desde ese momento, se observó que la conducta de los niños mejoraba si se realizaban campamentos juntos el lugar de por separado.
Esto dio paso al origen de las colonias infantiles granadinas. La primera involucró a nueve chicos y nueve chicas que viajaron al lugar disfrutando de 26 días de excursiones, y diversas actividades al aire libre. Este primer campamento tenía como objetivo que los participantes adquirieran hábitos saludables y valores importantes como el respeto por la propiedad, el orden, el amor al trabajo, el trabajo en equipo y aprender a ser solidarios entre ambos sexos. Según los registros que se tienen sobre la memoria de Berta Wilhelmi, estos objetivos se consiguieron, y los campistas pudieron pasar días diferentes, aprendiendo y adquiriendo nuevos valores.
En resumen, el origen de las colonias infantiles granadinas comenzó a finales del siglo XIX, producto de las iniciativas de la ciudad y en particular de personas como Berta Wilhelmi. En los años siguientes, los campamentos de verano en Granada, se celebraron todos los años y su crecimiento fue imparable.
En la actualidad, lo que inició como colonias infantiles granadinas, representa a todos aquellos campamentos de verano infantiles que se celebran en Granada y en el resto del país. Es importante conocer el origen de los campamentos de verano, y particularmente de los campamentos de verano infantiles, puesto que forman parte importante de nuestra sociedad.
Año tras año, en los periodos de vacaciones, es sorprendente ver la gran cantidad de niños y jóvenes que están dispuestos a continuar su aprendizaje, disfrutando de hacer nuevas amistades y divirtiéndose en el proceso. Sin duda, vale la pena conocer y profundizar en la historia de estos campamentos, que sin duda continuarán en constante crecimiento.
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